jueves, 13 de octubre de 2011

Presentación de mi Antología de Cuentos: "No me dejes morir"


“EL DOLOR QUE EXPERIMENTA UNA ROSA AL SER CORTADA, SÓLO PUEDE SER CONSOLADO CON EL CARIÑO DE QUIEN LA CORTÓ”

Pero a veces no es posible. Se corta una rosa para lucirla en un florero; porque es hermosa y la queremos sólo para nosotros o porque necesitamos llenar algún espacio vacío d nuestra casa. Creo q le llamaríamos loco a quien corta una rosa para estarla besuqueando, acariciando o dormirse con ella.

Por supuesto q la frase va mucho más allá. Se refiere al hecho d conocer a un alguien especial q llene tus momentos y sin el cual, después, no puedes vivir tranquilo. Se refiere a un alguien q, d pronto, llena tus días, tus horas, tus minutos, tus segundos… y del q esperas una llamada, un detalle, alguna palabra q t despierte la felicidad dormida durante su ausencia y con la q t prometa la dicha d un nuevo encuentro.

Los q nos dedicamos al arte, a escribir en particular, somos los seres más afortunados del universo. Reímos como todos; sufrimos como todos; amamos y odiamos como todos… con la pequeña diferencia d q podemos expresarlo con letras en un engañoso desahogo. Quien lee, tiene la oportunidad d sentirse acompañado por otra persona q experimenta sus mismos sentimientos. Quien escribe, tiene el poder d inventar q es otro el personaje q experimenta, aunque muchas veces sean sus propias sonrisas o sus propias lágrimas las q estén plasmadas en cada letra.

Ese fue el truco maravilloso q descubrí hace 26 años: el poder d compartir con los signos plasmados en un papel, cada sonrisa o cada lágrima, sin q el lector sepa a ciencia cierta cuánta arruga hubo o cuánta gota agria. El poder d decir: “T amo”, “T odio”, “T admiro”, “T quiero”, “T deseo…” al personaje q despierta el sentimiento, sin decírselo realmente, pero con la satisfacción d no habérmelo quedado guardado.

“No me dejes morir”, es el caso. En su superficie celebra 26 años d letras porque incluye textos escritos desde 1985 hasta la fecha, pero en su interior se guarda todo aquello q quise decirle al ser amado desde el día q inicié con la espera d su llegada, pasando por el momento en q nuestros ojos se encontraron… y hasta el día en q me di cuenta q sus sueños no me incluían en su alforja.

Fue hasta entonces cuando la antología inició la labor sublime d convertirse en compañía. La labor sublime d provocar sonrisas, lágrimas, esparcimiento, identificación… Más aún, en la súplica del escritor para el lector d q, con sus recuerdos, no lo dejen morir. Y es q nadie muere en realidad cuando tiene el privilegio d ser recordado; nadie muere en realidad cuando tiene el privilegio d llenarse d amigos por haberles compartido sus sentimientos; nadie muere en realidad cuando toma los talentos q Dios puso entre sus manos y los usa para darles a los q tiene enfrente algo q les pueda servir para sus vidas.

Aunque parezca árbol, soy una rosa. Desde el día q expuse mi primer trabajo me sentí cortado por el público… no tendré nunca en mis manos algo tan grande como para pagarle a ese público todo el cariño, el ánimo y las ganas d seguir trabajando, q me han permitido cosechar.

2 comentarios:

  1. es hermoso, es.... ¿cómo haces para expresarte de esa manera? ¿cómo haces para q te entendamos tan claramente?
    no sabía q este blog tenía 26 años...
    qué copado.

    ¿Sacaste ya algún libro? decime así lo compro.
    Muchas suerte! y sabes q te sigo apoyando

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  2. Vero preciosa, gracias por visitarme. El blog tiene apenas 2 años, jejeje, soy yo el que cumplí 26 años de carrera e hice una antología con la portada que ves en el blog y con varios de los cuentos que contiene. Eso de la expresión pues es algo que se da; a veces yo mismo me admiro de tener tal poder... no me queda más que ponerlo al servicio. La antología está a la venta con la editorial, si estás fuera del país, puedes pedirla por correo, pero no me lo sé. Te lo pongo por aquí proximamente. Un besote.

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