martes, 22 de abril de 2014

Igual que ayer



 
Disfrutaba tanto escribirte cartas con mi puño y letra;
y cuando se escapaba, entre tanta signo,
algún verso encadenado a otro, con resultado estrofa y al final poema...
en aquellos años en que no había "mails".

Y cuando cosechaba una sonrisa de tu rostro con alguna rosa
o un perrito,
o un oso de peluche o felpa,
en aquellos años en que no había monitos "whatsapperos"
ni figuras animadas para los inbox de un face.

Me gustaba despertarme muy temprano para ir hasta tu puerta
y escuchar de tus propios labios el buen deseo para el día;
y después imaginar que me extrañabas
hasta que la hora indicara nuestra espera debajo del reloj del metro,
en la estación que nos quedaba en el medio del camino
de tu trabajo y el mío,
para compartir lo vivido antes de irnos a dormir...
en aquellos días en que no existía el cel.

Y hoy me gusta, lo mismo que en aquel tiempo,
elevar una oración y un gracias hacia el cielo,
antes de perderme en el mundo de los sueños
y recordar tu sonrisa, tu amor, tu extraño y embriagante aliento,
para lo que no necesito nada de lo nuevo.

Y es que para ayer y para hoy,
aún no existe manera de comunicarse con el lugar en el que estás,
pero que no te aleja, ni un segundo, de mis pensamientos.

09 de agosto de 2013

domingo, 20 de abril de 2014

Las locuras del verbo amar



YO amo tu piel dulcísima, tus ojos brillantes, tus manos inquietas, tu gesto valiente y tus labios que, lo mismo hablan de todo y lo mismo saben callarse, lo mismo besan con morbo y lo mismo con amor prudente.

TÚ amas su piel antigua, sus ojos cansados pero llenos de sabiduría; sus manos temblorosas, su gesto seguro y sus labios que esperan tranquilos tus besos, la noche de cada día.
 
EL te ama. Tal vez porque fuiste el último tren que pasó por su vía, el último calor de sus cuatro estaciones y el espectador que aplaude el último cerrar del telón de su vida.
 
NOSOTROS nos amamos.
 
USTEDES para ustedes.
 
ELLOS para ellos.
 
YO... sólo amo tu piel dulcísima, cada noche, en mis sueños.


05 de octubre de 2013